Carlos Martínez reclamó que ser pregonero sirva para dar oportunidades y no sólo para contar que un joven con Síndrome de Down puede dar un pregón. "Por mucho que demuestre nuestra cara la existencia de una alteración genética, nada impide que consigamos aquello que nos proponemos".
Las fiestas patronales de Cuenca, dedicadas a San Julián, han contado este año con un pregonero especial que ha sabido captar la atención de los asistentes: Carlos Martínez ha compartido, por un lado, sus impresiones de la ciudad; y por otro el camino que ha recorrido desde el colegio hasta el instituto y en su formación profesional y su oposición, acompañado por quienes apostaron por el desde el principio.